Vemos con singular disgusto que las autoridades van a acatar el
“mandato” de los capitalinos implementando el “hoy no circula” en sábado
a la “brevedad”.
Nosotros participamos en la “consulta verde” y al responderla
pudimos ver que no había ningún tema referente a sistemas de transporte
alternativos; específicamente queríamos emitir una opinión a favor de
ampliar las ciclopistas porque nos parece una excelente opción para
transportarse de manera limpia, sana y eficiente.
En lugar de esto nos vimos obligados a emitir nuestro rotundo rechazo a
la medida del “no circula” los sábados. Esta medida es ridícula e
inútil, como lo ha sido el “hoy no circula” desde un principio.
Para empezar, téngase en cuenta que para mucha gente (me incluyo), por
el horario que tenemos entre semana, el sábado y domingo son los únicos
días en que podemos realizar labores como ir al super, salir de paseo
con la familia y otras actividades. De restringirse el tráfico los
sábados, lo único que sucedería es que esa carga se transpasa a los
domingos, y eventualmente se buscará también restringir los domingos y
poco a poco llegaremos al punto ideal donde se le prohibirá a la gente
utilizar sus automóviles. ¿o no?
Sólo que como de costumbre, se penaliza a aquellos con menos recursos;
muchos simplemente comprarán un coche especial para usarlo los fines de
semana. Aquellos que podemos tener sólo un coche tendremos que comprimir
aún más nuestros compromisos para realizarlos todos el domingo.
¡Valiente día de descanso!
Antes de tomar una medida de esta especie se tienen que dar
alternativas, como la mencionada ampliación de las ciclopistas y
garantizar la seguridad al ciclista; una vez hecho esto mucha gente
voluntariamente dejaremos nuestros automóviles para circular en
bicicleta.
Además resulta ridículo que se nos restrinja cada vez más el uso del
automóvil cuando se está pagando una cantidad específicamente por el
derecho de tenerlo y usarlo. Creo que si existiera congruencia, se
debería condonar un porcentaje del pago de tenencia, ya que a fin de
cuentas nos están prohibiendo utilizar el auto, que es la razón de dicho
pago.
Y por último, dejémonos de hipocresías y llamar al “hoy no circula” un
“descanso”. Mi coche no necesita descansar, está hecho de metal y otros
materiales muy resistentes. Llamemos a las cosas como son; cuando el
programa “hoy no circula” era voluntario la cosa era distinta, pero
actualmente, aceptémoslo, simplemente se le está prohibiendo a la gente
el uso de un bien que se adquirió.